Como es más que evidente, la COVID-19 ha golpeado con dureza desde muchos flancos afectándonos en la salud, hábitos, relaciones afectivas… y para muchas empresas y profesionales, en lo económico.
Uno de los sectores peor parados en nuestro país es el del turismo, al que se dedica la empresa Centraldereservas.com para la que trabajo como consultora y diseñadora 360º desde hace ya cuatro años. Ha sido durísimo presenciar cómo los y las compañeras redoblaban sus esfuerzos: atender a cancelaciones, negociar con mayoristas y hoteleros, mientras que las reservas se frenaban en seco y las contrataciones ya hechas, tenían que ser reembolsadas.

Mi postura es siempre la de mantener una actitud positiva, buscar soluciones, que siempre las hay, y me constaba que otros compañeros también estaban haciendo propuestas para tratar de capear el temporal; estábamos a finales de marzo y aún no sabíamos la que se nos iba a venir encima aunque lo intuíamos.
Algo sí tenía claro: no era momento para ventas, teníamos que pensar qué iba a pasar con nosotros a medio y largo plazo, y creí fundamental reforzar el reconocimiento de marca.
Lo primero que se me vino a la cabeza era lanzar una campaña de participación en redes sociales, animando a que los usuarios compartiesen lo que les gustaba de su ciudad, tratando de hacer una cadena solidaria de apoyo a la hostelería y pequeño comercio, además de poner foco en los lugares de interés turístico, para que al reactivarse el sector a nivel nacional, invitara a visitar localidades y lugares menos conocidos del país.

Fue algo sin madurar, llevado por un arrebato, y en cuanto envié el mensaje a dirección, pensé: ‘menuda bobada, apenas tenemos tráfico en redes y encima el contenido se va a quedar ahí, sin tener ningún impacto, porque si la gente es quien comenta, cómo vamos a enlazar con la web y quién se va a interesar en entrar al portal, si no pueden hacerse reservas más que para personal de ayuda‘.
Y entonces, medio enfadada conmigo misma, me puse a rumiar la idea hasta que di con el matiz que haría la diferencia: los comentarios tenían que guardarse en el portal.
Así que -a riesgo de ponerme pesada- volví a escribir un email, esta vez con más seguridad en la idea, dividiendo los objetivos en dos bloques:
Qué vamos a obtener:
- Mejorar el reconocimiento de marca
- Conseguir contenido original y rico para SEO
- Aumentar el nº de visitas al portal
- Dinamizar la redes sociales
- Generar confianza y cercanía
- Darnos a conocer a nuevos usuarios
Y qué vamos a aportar:
- Impulsar el turismo
- Combatir la crisis económica que se avecina apoyando a:
- Quienes viven del turismo
- Cuyo trabajo se favorece del turismo
- Empatizar con nuestros clientes y crear unión social apelando al sentimiento identitario
Para conseguir todo esto había que plantear una estrategia de llamamiento multicanal y lo más importante: desarrollar un espacio en el portal para acoger los comentarios.
Esta tendría un aspecto de feed masonry, con posibilidad de compartir los comentarios en redes:

Y se dejarían los comentarios a través de un formulario que abriría desde una modal, con posibilidad de subir fotos:

Pausa. Rebobinemos: Estamos en una crisis del sector, tras mes y medio de caídas de las reservas en picado y yo estaba sugiriendo invertir en un nuevo proyecto. La situación era muy delicada, pero la idea y sus beneficios estaban ahí, y el momento también, no podíamos desaprovecharlo.
Para sacar la idea adelante era fundamental optimizar los recursos: inventar lo justo, reutilizar al máximo y coordinar el equipo para hacerlo rápido.
Este proyecto demuestra la eficacia de contar con una guía de estilos por componentes, ya que prácticamente todos los elementos de diseño estaban creados y testeados.

Otro aspecto que marca una grandísima diferencia es contar con un equipo profesional, y éste lo es y mucho: estamos acostumbrados a trabajar en remoto desde antes del confinamiento, sabemos cada uno cuál es nuestra área y el compromiso tanto con la empresa como con el resto de compañeros es total.
Como yo misma me encargaba de la parte de diseño, cada vez que surgía un requisito técnico o legal que pudiera suponer un retraso, fui revisando los bocetos sobre la marcha, añadiendo o modificando elementos y funcionalidades, adaptando el proyecto a los ritmos y disponibilidad del equipo de desarrollo.
Además de los componentes, ‘reciclamos’ funcionalidades ya existentes en otras áreas del portal:
- Formulario con carga de imágenes, que ya estaba implementado para comentarios de hoteles
- Selector de la localidad: modificamos el suggest de la caja de búsqueda, acotando los resultados a localidades españolas:

- Galería con carrusel, con miniaturas adaptables según número de imágenes

- Modal con botones para compartir comentarios, que ya usamos en las páginas de hoteles

- Invitación al registro con ventajas una vez hecho el comentario, para no ser intrusivos:

- Las propias cards de comentarios que hemos creado como nuevo componente para el feed, se están reutilizando ya en las páginas de localidad, alimentando con su contenido:

Hace solo dos semanas desde que se lanzó el proyecto y ya hemos conseguido participación: localidades de una misma provincia han sumado varios comentarios de modo que las agrupamos y habilitamos la navegación:

El diseño, como he comentado antes, está en evolución constante, de modo que en unos días será posible navegar entre localidades y comentarios, favoreciendo mucho más el SEO:

Falta mencionar la parte ‘no visible’ para el usuario: se desarrolló un entorno para moderar los comentarios de los clientes, siendo posible determinar cuáles son aptos para aparecer en el feed, cuáles en las landings y autorizar o bloquear fotos.
De manera paralela y no menos importantes, se han realizado las labores de comunicación. Por muy ágiles que hemos sido con la salida a producción, la situación hace que cada día, el estado anímico y receptivo sea muy distinto al anterior. La labor de empatía es muy grande.
Primero apostamos por transmitir un sentimiento de unión social y solidaridad con los comercios -no solo hostelería-. También animando a los visitantes a compartir lo que consideran mejor de su localidad, con el fin de verle el lado positivo a la situación y animando a otros a conocerlos cuando sea posible volver a viajar.

Poco a poco, ya que se está notando las ganas por salir de viaje, el discurso irá más enfocado al disfrute, a recordar viajes que hayan hecho dentro de nuestro territorio. Y en vista a largo plazo, a los clientes con reservas les invitaremos a compartir su experiencia in-situ.
De este modo se pretende conseguir además de contenidos nuevos, ofrecer una referencia en base a experiencias reales que consideramos de gran valor para el usuario que está planificando sus vacaciones.
Y este es el relato (aún incompleto) de cómo nació #SoyTurismo y de cómo nos volcamos para sacar adelante una idea en plena crisis del sector, con unos tiempos y recursos irrisorios, sí, pero con determinación y confianza.
Faltará medir qué impacto tiene, qué tráfico conseguimos y la utilidad a largo plazo, pero estamos contentos con el trabajo realizado, la sincronía entre compañeros y deseando -¡cómo no!- que pronto podamos volver a viajar.
Felicidades por la iniciativa y realización de este proyecto. Muy bien. ¡Pronto disfrutaremos de nuevos viajes!
¡¡Muchas gracias!! Esperemos que sí, que podamos viajar y estar seguros. Saludos 😉